Crean el Premio Hispanoamericano de Poesía José Mármol – Diario Libre

Con el objetivo de fomentar la creación poética y dar visibilidad a nuevas voces en el ámbito literario de habla hispana, se anunció este miércoles la creación del Premio Hispanoamericano de Poesía José Mármol, una iniciativa conjunta de la editorial española Valparaíso Ediciones y la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña (BNPHU).

El galardón, que se entregará anual, está dirigido a autores de todos los países hispanoamericanos y tiene como propósito la publicación y distribución de obras poéticas inéditas en español. Su primera convocatoria ya está abierta y cerrará el 15 de diciembre de 2025.

Un homenaje a una figura clave de la poesía dominicana

Este nuevo reconocimiento literario lleva el nombre del poeta y ensayista dominicano José Mármol, quien cuenta con una destacada trayectoria literaria tanto a nivel nacional como internacional. 

Mármol fue galardonado con el Premio Nacional de Literatura de República Dominicana en 2013 y con el Premio Casa de América de Poesía Americana en 2012.

La elección de su nombre, según explicaron los organizadores, responde al deseo de rendir tributo a una figura considerada fundamental para la poesía contemporánea en español.

«José Mármol es un referente para la poesía hispanoamericana, una voz que los nuevos poetas reconocen y siguen, un maestro literario que ha obtenido reconocimiento en todas las latitudes de la lengua», aseguró Fernando Valverde, poeta y profesor de la Universidad de Virginia, en representación del Consejo Editorial de Valparaíso Ediciones.

El anuncio se realizó en un acto conjunto entre la editorial y la Biblioteca Nacional, donde se destacaron las implicaciones culturales del premio y su alcance internacional

En palabras de Valverde, esta iniciativa coloca al Caribe como epicentro de una plataforma para la diversidad literaria en lengua española. Desde la BNPHU, su director Rafael Peralta Romero celebró que el país sirva como punto de partida para un premio con estas características.

«Es motivo de satisfacción que la Biblioteca Nacional funja como punto de apoyo para un premio internacional que se anuncia desde República Dominicana y que lleva el nombre de un valioso escritor nuestro», sostuvo Peralta.

Por su parte, el propio José Mármol agradeció a las instituciones convocantes y resaltó la importancia del premio como una vía para proyectar la riqueza cultural y lingüística de Hispanoamérica.

«Quiero expresar mi agradecimiento a Valparaíso Ediciones y a la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña por respaldar una iniciativa que, junto a otros premios que promueve la editorial, ampliará la oportunidad para que nuevas voces poéticas de Hispanoamérica puedan ser conocidas y divulgadas, en favor del reconocimiento y proyección de la diversidad cultural y riqueza de la lengua española».

Bases y jurado

Los participantes deberán enviar libros inéditos en español, sin restricción de tema o extensión, presentados bajo seudónimo. Las propuestas deben enviarse en formato digital, a través de dos correos electrónicos: uno con el manuscrito y otro con los datos personales del autor, incluyendo una breve biobibliografía.

  • Las obras deberán enviarse al correo premiojosemarmol@valparaisoediciones.es.

El jurado estará presidido por José Mármol e integrado por un representante de la Biblioteca Nacional, un representante de Valparaíso Ediciones y un autor de reconocido prestigio internacional.

El premio consistirá en la publicación impresa y digital del libro ganador dentro de la Colección de Poesía de Valparaíso Ediciones, que también se encargará de su comercialización. El autor recibirá los derechos correspondientes por la venta de la obra, que será presentada oficialmente durante el primer semestre de 2026.

LA PROFUNDA VOZ QUE HABITA

Un libro que lleva por título “Si lo hubiera sabido” entra en el tiempo de los recuerdos donde ese pasado irreal recorre el interior del poeta Gustavo Gac-Artigas y del sujeto lírico: “no es él quien se desangra/ es la humanidad”. Este verso agazapado entre versos me llevó a pensar en los motivos de esta vacuidad. El poeta pide por la libertad de sus palabras y eleva todo pedido a la súplica (…) A ti, lector, te pido no te defiendas/ esta historia no te ataca/te suplica.

Hay una voz más profunda y es la de aquel que escribe como salvación: (…) se escribía en secretas páginas”. Todo aquello que se silencia, ruge en los versos y se transforma en un faro con su luz silenciosa recorriendo el mundo: hasta que encierren la última palabra,/enmudezcan el último verso. Es una lucha abierta contra la represión de la libertad de expresión. Una literatura comprometida, una literatura de resistencia ante la cual no habrá silencio.

Gac-Artigas decide universalizar su postura y se puede apreciar una gran densidad lírica en el acto sublime del legado, en una metáfora donde el hecho de narrar se concentra en la palabra pluma, pero con absoluta confianza en el prójimo, ese tú que trasciende todo análisis. Yo te entrego mi pluma/ antes de caminar hacia el olvido/ tú/ yo/ nosotros.

Aquello que late y latirá es la memoria colectiva.

El libro continúa con una yuxtaposición de mantos, una secuencia de entidades distintas que va desde la imagen poderosa de “el manto rojo”, un tinte costoso de combate y que se vincula al derrame de sangre, como bien advierte en el verso citado en el primer párrafo; no es solamente una pérdida, es un acto de martirio que se debate entre dos cuestiones semánticas: colonizar o conquistar con idéntico final: someter.

A pesar del horror, a los pueblos les pertenece la tierra; y es en el manto pardo donde una voz se alza y escribe: (…) quizá el horror nació con nosotros” y enumera los posibles orígenes y desgasta las posibles conexiones.

Con exactitud y precisión las voces se suman y transitan la ceguera del alma que enmudece: (…) el manto rojo, verde, blanco y negro / se vistió de violencia / el lenguaje universal / el esperanto del terror (…)

Difícil seguir respirando por este lado del mundo, parece decir aquel que habla junto al poeta hasta el contrapunto de identidades y entonces “el manto de franjas y estrellas”.

No es la luz de los astros la que iluminan las franjas precisamente, sino una transición en busca de la conquista: (…) cerré las puertas del paraíso/ para preservar al privilegio de los elegidos/ en la tierra bendita de Dios (…)

El cerrar las puertas es una exclusión del “locus amoenus” y también establece una barrera no aleatoria entre lo sagrado y lo profano, sino de protección; ya que si el espacio fuese abierto, implicaría un peligro hacia aquellos que protege. Todo transcurre en un lugar que se considera bendito, quizá por un dios pagano, pues la escritura en minúscula parece indicarlo.

Así llegamos a la lectura de “El manto rojo con destellos dorados”, donde en la metáfora: «Vio la luz en el vientre de la tierra», aparece la idea del regazo maternal porque el cambio acontece desde el centro mismo, desde la necesidad de manifestarse ante el dolor, y prosigue: “La lucha revolucionaria desenrolló su ruta”. Lo gradual, lo desplegado se advierte con un verbo: desenrollar para las luchas sociales por venir.

Gradualmente, Gac-Artigas llega al clímax con el Canto 6 “El manto de las dictaduras cubrió mi continente”. Aquí el manto es oscuridad, es control, es censura que llega con el posesivo “mi”; es una declaración de sentimientos y pertenencia; y, entonces, el manto es la metáfora que ilustra el autoritarismo. Se resume quizá en la personificación: “Los colores gritaban el pasado/ los colores hablaban con orgullo/ somos/seremos/soy”. Dos verbos potentes: gritar y hablar se unen a la historia de un continente y a la identidad manifiesta en el primer tramo de esta lectura: el pasado es de la comunidad y también su historia; pero allí no se queda, sino que se proyecta hacia una existencia futura. Todo se une en “soy”, se resume lo colectivo en lo individual en: memoria, identidad y pertenencia.

En el último canto, “el manto blanco y azul se viste de rojo”. Me pregunto: ¿qué describe el poeta? Quizá hable de una nación, quizá de la pérdida de la inocencia que inicia pacíficamente, pero que finaliza en el rojo.

Se lee: “El silencio grita/grita de dolor/se retuerce en las llamas”. Este oxímoron, donde la ausencia es presencia, donde la paz no es presencia. Aquí el sujeto lírico sostiene al poeta en la herida provocada de su voz interior, un agón que se debate.

El último poema, «El ruego del poeta», lo atraviesa un verso: «Libera tu manto/ antes de que el dolor/ estremezca nuevamente al mundo». Aquello que parecía proteger fue una carga que debe ser abandonada. ¿Será aquella del pasado, la de la identidad o la de la verdad de considerar que existe?

Hay una conexión ineludible entre el lugar del individuo y el destino de la humanidad; y es por ello que, para no entrar en el caos definitivo, el poeta propone que la inercia no contribuye y que el cambio contribuirá a la liberación.

Puedes comprar el poemario en: https://valparaisoediciones.es/tienda/poesia/861-432-si-lo-hubiera-sabido.html

Fernán Núñez vuelve a citar a la poesía: 600 manuscritos de 25 países optan al Premio María Rosal

La segunda edición del certamen literario, impulsado por el Ayuntamiento y Valparaíso Ediciones, mantiene el nivel de participación internacional alcanzado en su debut.

Cerca de 600 manuscritos procedentes de 25 países optan al II Premio Internacional de Poesía María Rosal, convocado por el Ayuntamiento de Fernán Núñez en homenaje a la reconocida escritora, natural de esta localidad cordobesa.

La cifra se mantiene respecto a la primera edición, lo que confirma la consolidación de un certamen que, en apenas dos años, ha ganado peso y prestigio en el panorama poético internacional.

La iniciativa, impulsada por el consistorio fernannuñense y la editorial Valparaíso Ediciones, vuelve a poner a Fernán Núñez en el mapa cultural, reafirmando su papel como espacio abierto a la creación literaria. Será precisamente esta editorial quien publique el poemario ganador en su Colección de Poesía.

El plazo de recepción de obras finalizó el pasado 30 de junio, con una notable participación de autores de Hispanoamérica y España. Han llegado trabajos desde Colombia, Uruguay, Argentina, Venezuela, México, Perú, Ecuador, Guatemala, Cuba, Chile, República Dominicana, Honduras, Costa Rica, Nicaragua, Bolivia o El Salvador. También desde países europeos como Italia, Bélgica, Alemania, Austria, Ucrania, Francia, Rumanía o Dinamarca, e incluso desde lugares como Estados Unidos o Irak.

El próximo 1 de octubre se darán a conocer los finalistas, una vez el prejurado haya evaluado todos los textos. El fallo definitivo llegará antes de que termine noviembre. El jurado, presidido por María Rosal e integrado por voces destacadas del ámbito literario, será el encargado de decidir qué autor o autora se lleva el premio, que se anunciará en un acto público en Fernán Núñez.

El galardón está dotado con 2.000 euros y la publicación del libro ganador.

En la primera edición, el valenciano Bernard Engel (1991) se alzó con el premio gracias a La estúpida belleza de las deflagraciones, un poemario “rompedor” que, según el jurado, construía “su propia cosmogonía emocional y sensorial, entre la realidad y el mundo onírico, la luz y la amargura, en una búsqueda a ciegas de palabras que den sentido y futuro”.

Fundada en Granada en 2012, Valparaíso Ediciones se ha consolidado como una de las editoriales literarias más internacionales del ámbito hispano. Con presencia en Colombia y Estados Unidos, y distribución exclusiva en países como Perú, Argentina o Chile, su catálogo incluye nombres como Derek Walcott o Gabriela Mistral, premios Pulitzer como Jericho Brown, Rita Dove o Charles Simic, y figuras reconocidas como Claribel Alegría, Piedad Bonnett, Joan Margarit o Rafael Cadenas.

Además de poesía, Valparaíso cuenta con colecciones de narrativa, literatura infantil, arte y una línea de investigación científica, respaldada por acuerdos con universidades de Europa y América Latina.

Jorge Fernández Granados, V Premio Internacional de Poesía de Fuente Vaqueros con ‘Materia oscura’

Jorge Fernández Granados se alza con el V Premio Internacional de Poesía de Fuente Vaqueros por ‘Materia oscura’, destacando entre cerca de 500 participantes de diversas nacionalidades en la celebración del legado de García Lorca

El libro ‘Materia oscura’, del poeta Jorge Fernández Granados (Ciudad de México, 1965), ha resultado ganador del V Premio Internacional de Poesía de Fuente Vaqueros ‘El duende, ¿dónde está el duende?’, convocado conjuntamente por el Ayuntamiento de este municipio del área metropolitana de Granada y la editorial Valparaíso Ediciones.

Así se ha dado a conocer este miércoles, según ha informado Valparaíso Ediciones en una nota de prensa, en el Centro de Estudios Lorquianos de Fuente Vaqueros, coincidiendo con la celebración del ‘Cinco a las cinco’, que conmemora el 127 aniversario del nacimiento en esta localidad granadina del poeta Federico García Lorca.

El jurado, compuesto por los poetas Ramón Martínez y Raquel Lanseros y la traductora y profesora Nieves García Prados, ha tomado su decisión por mayoría y ha destacado que el ganador se trata de un libro «dueño de una amplia tradición que no renuncia por ello a los temas más actuales, demostrando cómo la poesía puede ser la respuesta para algunas de las preguntas más inquietantes de nuestro tiempo».

«El tono melancólico nunca se impone incluso cuando se afirma el final de un tiempo y la manera en la que, a una velocidad nunca vista antes, nos empezamos a convertir en historia pasada», han añadido. Jorge Fernández Granados es también traductor. Ha publicado, entre otros, los libros de poesía: ‘El arcángel ebrio’ (UNAM, 1992), ‘Resurrección’ (Aldus, 1995), ‘El cristal’ (Era, 2000), ‘Los hábitos de la ceniza’ (Joaquín Mortiz, 2000), ‘Principio de incertidumbre’ (Era, 2007), ‘Si en otro mundo todavía. Antología personal’ (Almadía, 2012) y ‘Lo innumerable’ (Era, 2018).

Colabora en diversas revistas y periódicos como La Jornada Semanal, Poesía y Poética, La Gaceta del Fondo de Cultura Económica, Viceversa y Letras Libres. Fue becario del Centro Mexicano de Escritores (1988-89), del Instituto Nacional de Bellas Artes (1991-1992) y del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (1992-93 y 1997-98). Ha recibido premios en el mundo de la poesía como el Internacional de Poesía Jaime Sabines, el Nacional de Poesía Aguascalientes, el Iberoamericano de Poesía Carlos Pellicer y el Nacional de Literatura José Fuentes Mares. Pertenece al Sistema Nacional de Creadores de Arte desde 2001.

Consolidando ya su trayectoria en sus cinco años de historia, al premio de este año aspiraban cerca de 500 poemarios de casi una treintena de nacionalidades diferentes, principalmente de Hispanoamérica y España, y procedentes de países como España, Francia, Alemania, Estados Unidos, Portugal, Canadá, Italia, Rumanía, Bolivia, Venezuela, Colombia, Uruguay, Paraguay, México, Guatemala, Nicaragua, Costa Rica, El Salvador, Perú, Ecuador, Brasil, Argentina, Puerto Rico, Chile, Honduras, y Panamá, entre otros.

El premio consistirá en la publicación del libro en la Colección de Poesía de Valparaíso Ediciones, y llegará a librerías en el primer semestre de 2026. En la primera edición, el poeta ganador fue el colombiano Ramón Cote, por ‘Libro de averías’, mientras que en la segunda ganó el argentino Boris Rozas, por ‘Lugares a los que volver con el buen tiempo’. La tercera edición fue ‘ex aequo’ por ‘Cuaderno del insomnio’, del ecuatoriano Christian Zurita (Quito, 1993) y ‘Reflexiones poéticas’, del belga Germain Droogenbroodt (Rollegem, 1944). En la cuarta edición resultó ganador el panameño Javier Alvarado (Panamá, 1982) con ‘Cuaderno inglés de poesía feminista’.

Nota de prensa: fallece Carlos Rojas

Valparaíso Ediciones

Fallece Carlos Rojas, uno de los mayores novelistas de la posguerra española, ganador del Premio Planeta y el Premio Nadal.

El escritor catalán Carlos Rojas, nacido en Barcelona en el año 1928, ha fallecido este domingo en Greenville, Carolina del Sur, donde residía junto a su hija, la profesora Eunice Rojas, desde hacía casi un año.

Rojas, uno de los mayores novelistas de la posguerra española, y autor de más de 20 novelas, fue además un destacado ensayista y obtuvo importantes reconocimientos como el Premio Nacional de Literatura (1968), el Premio Planeta (1973) y el Premio Nadal (1979).

Doctor en Filosofía y Letras, Rojas, que fue lector de español en la Universidad de Glasgow (Escocia), llegó en 1957 a Estados Unidos, concretamente a Florida, donde fue profesor ayudante de español en el Rollins College. En 1960 comenzó a trabajar en la Universidad de Emory, en Atlanta, donde fue profesor de literatura durante 35 años.

En palabras de su amigo, el poeta y profesor Fernando Valverde, «Rojas fue un escritor total, capaz de lograr el milagro de la literatura convirtiendo al lector en mil hombres”. “Nunca olvidaré la cercanía y humildad con la que me acogió en Estados Unidos. Hoy me siento doblemente huérfano. La literatura en lengua española ha perdido a uno de sus grandes referentes y yo además a un amigo entrañable», afirmó al conocer su muerte. 

Sobre su vida y trayectoria, Valverde aseguró que Rojas fue “hasta el final” un “republicano español” que se preocupaba por lo que ocurría en España, tierra que añoraba y en la que habría deseado morir. “Su vida es un ejemplo de militancia cívica y de defensa de la libertad. Su trabajo, silencioso desde la distancia, fue reconocido de forma intermitente. Su obra y su legado son inmensos y España tardará en reconocerlo, pero no tengo duda de que el tiempo lo situará como uno de nuestros más grandes autores”.

Carlos Rojas publicó su primera novela, De barro y esperanza, en 1957 y en 1959, ganó el Premio Ciudad de Barcelona, con El asesino de César. En 1963, obtuvo el Premio Selecciones de Lengua Española con La ternura del hombre invisible; en 1968 el Nacional de Literatura con Auto de Fe; y en 1973 el Planeta con su novela Azaña, un extraordinario retrato del que fue presidente de la República española.

Cuatro años más tarde logró el Ateneo de Sevilla con Memorias inéditas de José Antonio Primo de Rivera, y en 1979 conquistó el Premio Nadal con El ingenioso hidalgo y poeta Federico García Lorca asciende a los infiernos. En 1984 ganó también el premio Espejo de España con El mundo mítico y mágico de Picasso.

Después publicaría El jardín de las Hespérides (novela, 1988), Yo, Goya (ensayo, 1990), Proceso a Godoy (novela histórica, 1992), Alfonso de Borbón habla con el demonio (novela, 1995) y ¡Muera la inteligencia! ¡Viva la muerte! (ensayo, 1995), La vida y la época de Carlos IV (novela histórica, 1999), Puñeta, la Españeta (ensayo, 2000), Momentos estelares de la guerra de España (ensayo, 2000), y Diez crisis del franquismo (ensayo, 2003).

Su última novela fue El último rey sobre la tierra, publicada por Valparaíso Ediciones en 2016. Se trata de un libro original y perfecto en la forma, dueño de una tensión que entrelaza el alma del pasado siglo con el mundo clásico, recorre la Europa de entreguerras para mostrarnos la angustia de haber nacido en otro tiempo, el drama del olvido, el abandono y la muerte.

La traductora literaria Edith Grossman ha considerado a Carlos Rojas como «el escritor de más extensa capacidad imaginativa y creadora de la posguerra civil española, el grupo llamado Generación del 50. Y ciertamente también es uno de los novelistas más extraordinarios del siglo XX en cualquier idioma».

Por su parte, Federico Díaz Granados, director de Valparaíso Ediciones, dijo que se trataba de un día “especialmente triste” por la pérdida de “el más importante narrador que ha publicado nunca esta casa”.