Siluetas en las sombras. Nubes.
El  perfil de las hojas en otoño.
Madera con sus círculos y manchas.
Papel pintado. Líneas en el suelo.
Mercurio sobre el agua de ese plato.
Trazos contra la arena.

Tienes ante tus ojos lo que usa en sus juegos.
Mira de qué manera busca
alguna semejanza a los dibujos
que el azar ha puesto en las cosas.
Cómo de esa falsilla calca rostros,
bocas que están gritando, animales de fábula
objetos cotidianos y paisajes.
Igual que hacen los niños está leyendo nubes
y sigue barajando símbolos
cuando intenta contarse
los argumentos de la vida,
la secuencia convulsa o lenta
en que gira y se desvanece el mundo.

(transcrito del cuaderno perdido, página 1)